Contacta

Mallorca Music Magazine te acerca toda la actualidad musical balear con especial atención a la escena local.

DATOS DE CONTACTO

Tarifas agenda y banners

Publicado el 10 abril, 2021

Charlie Parker, los años finales

Por José Luis Miró
Charlie Parker - Mallorca Music Magazine

La heroína destruyó al genio del saxofón: un año antes de su prematura muerte le prohibieron la entrada en el club que llevaba su nombre

El saxofonista Charlie Parker (1920-1955) inventó el bebop, el subgénero que rompió las reglas del jazz y, desde una posición de indisimulada soberbia, pretendió reducir a mera trivialidad todo lo que se había hecho hasta entonces. Los músicos de esta escena, surgida en los años 40 del siglo XX como respuesta a las sonoridades confortables y bailables del swing, querían ser tratados como «artistas verdaderos» y gozar de un reconocimiento análogo al de los intérpretes de música clásica.

El código de conducta exigía, por un lado, mostrar un cierto desprecio por el público y, por otro, desdeñar sin contemplaciones a cualquier otro músico que se autoproclamara «de jazz» y no tuviera el nivel suficiente para ajustarse a las complejas normas del nuevo y exigente estilo.

Esta pandilla de snobs malhumorados, algunos verdaderos genios y otros no tanto, se hacían llamar hipsters y se consideraban herederos del dadaísmo: tipos amorales pero refinados que encontraron en el jazz y las drogas la válvula de escape para dar sentido a su particular concepción de la vida.

El gurú de esta filosofía no sólo musical fue Chalie Parker, «Bird», uno de los jazzmen más prodigiosos e innovadores de la historia, cuya influencia provocó la grieta que marca la frontera entre el jazz clásico y el moderno. Por desgracia, muchos de sus discípulos se tomaron su ejemplo demasiado al pie de la letra y decidieron imitar también sus peores vicios, en la creencia de que para ser bueno había que ser también yonki. No pocos acabaron muriendo muy jóvenes, víctimas de las adicciones a las drogas y al alcohol. Otros se salvaron por los pelos.

Los historiadores del jazz suelen situar el declive «Bird» en los primeros años 50, a su regreso de una gira por Europa, precisamente cuando se suponía que había superado sus peores trances y llevaba una vida en apariencia cómoda junto a su esposa y sus dos hijos. En el 52 lo vetaron en el club donde solía tocar en Los Ángeles por montar un escándalo. Un primer indicio de que algo no andaba bien en la cabeza de Charlie se había producido meses antes, cuando no fue capaz de grabar una sola toma buena durante una sesión junto a Dizzy Gillespie y Thelonious Monk.

Su existencia se fue definitivamente a pique en 1953, tras el fallecimiento de su hija Pree a causa de una neumonía. En 1954 intentó suicidarse en dos ocasiones y le prohibieron la entrada en el Birdland, el club de jazz que llevaba su nombre. No me quiero ni imaginar el pollo que debió montar para ser vetado en su propia casa. El 23 de marzo de 1955 dejó este mundo. Su leyenda y su música perviven 65 años después.

Charlie Parker - Jam Blues

En aquellos últimos años convulsos Parker dejó para la historia la grabación de una Jam Session maravillosa. No es ni de lejos su obra más destacada, pero sí una de las que mejor entran a la primera escucha. El disco se registró un día sin concretar del mes de julio de 1952 en Los Angeles, bajo el auspicio del productor Norman Granz, y fue editado en CD en 1990 por el sello Verve a partir de los masters originales como lanzamiento de una de aquellas colecciones que se vendían en los kioscos cuando la gente compraba discos. Le secundaron sobre el escenario Oscar Peterson (piano), J.C. Heard (batería), Benny Carter y Jonhy Hodges (saxo alto), Flip Phillips y Ben Webster (saxo tenor), Barney Kessel (guitarra), Charlie Shavers (trompeta) y Ray Brown (contrabajo).

Jam Blues es la canción que abre el álbum. Bird entra en el minuto 5:20, a continuación de un vertiginoso solo de piano donde se escucha de fondo el canturreo característico de Peterson. Este disco ofrece, además de buen sonido, la posibilidad de comparar el timbre de Bird con el de otros saxofonistas de la escuela clásica, como Hodges, Carter o Webster.

Enrédate en nuestras redes:

Publicado por:

José Luis Miró - Mallorca Music Magazine

Periodista desde 1991. Familia, hard bop, mar, boxeo y rock. Por este orden. Team Frazier.

No hay comentarios

Deja un comentario

Con la colaboración de: