Tras recorrerse buena parte de Europa o Latinoamérica y haber visto truncada la celebración de su vigésimo aniversario de carrera por la dichosa pandemia, el próximo 20 de noviembre recibiremos en Es Gremi a una de las bandas más importantes del momento dentro del Metal español, nada menos que los albaceteños Angelus Apatrida.
La banda manchega de Thrash Metal regresa a la isla ocho años después de su primera y última visita hasta la fecha, para presentar su séptimo trabajo de estudio, de título homónimo Angelus Apatrida. Sobre lo que envuelve a este disco y muchas cosas más tenemos el placer de hablar con Guillermo Izquierdo, voz y guitarra de la banda.
Bueno, lo primero de todo, por supuesto, agradecerte que nos cedas un ratito para esta entrevista, que imagino que andas bastante liado con tus cosas.
Nada, hombre, no te preocupes. Además ya echaba de menos las entrevistas, así que un placer.
Han pasado nada menos que ocho años desde vuestra anterior visita a la isla. ¿Qué recuerdos guardas de aquella noche?
Pues todo muy bueno, porque además fue un día para enmarcar ya que pasó de todo. Yo venía arrastrando una lesión, que no sabía exactamente qué tenía, en el hombro izquierdo y justo esa noche en el ferry me empezó a doler a saco. No pude dormir en toda la noche, al llegar no podía mover el brazo… total, que tuvimos que ir al hospital de Son Espases nada más llegar, luego me tiré todo el día sin dormir y fui con el cabestrillo a la prueba de sonido.
Y del bolo… es complicado recordar el bolo en sí, joer, es que hace ya ocho años, han pasado mogollón de cosas, pero sí recuerdo que al final estuvo muy guay y fue una experiencia cojonuda, la verdad.
Por aquellas veníais presentando The Call y no se puede negar que, en estos ocho años, la evolución de la banda ha sido impresionante. ¿Cómo lo véis vosotros desde el seno de la banda?
Bufff, en ocho años han pasado muchísimas cosas. Aparte de todo lo que hemos ido haciendo durante estos años, la banda ha crecido de manera exponencial y ahora mismo es una banda completamente diferente a lo que visteis allí en 2013.
Entonces íbamos con The Call recién salido, mucho más amateur, y ahora somos una banda mucho más profesional, con otros tres discos entre medias y, joder, cómo ha pasado el tiempo. Han pasado tantísimas cosas que no es fácil explicar pero bueno, para eso volvemos e intentaremos que no vuelva a pasar tanto tiempo hasta la próxima.
Esta vez venís presentando vuestro álbum homónimo, séptimo de vuestra carrera y con el que os metisteis nada menos que en el primer puesto en las listas de ventas. Casi nada, ¿Verdad?
Pues ya ves, tío. La verdad es que fue cojonudo. Desde que entramos a trabajar con Century Media la verdad es que la popularidad de la banda ha ido creciendo, se han vendido más discos y, aunque ya habíamos entrado en algunas listas, disco a disco hemos ido subiendo posiciones.
Recuerdo que con Clockwork (2010) entramos en el número 49 o 47, algo así, después con The Call ya entramos en el veintipico, y luego con Hidden Evolution ya fue un poco el pelotazo, que nos quedamos en el número 2 y aún dicen las malas lenguas que no se nos quiso dar el 1 porque a una discográfica no le salió de la… de las narices. Y ya ahí dijimos «hostia puta, no?», una banda española, una banda de Thrash de Albacete en el número 2 y tal.
A partir de aquí cada año se van complicando, cada vez hay más lanzamientos con estilos de música como el trap o el reggaetón y toda esta movida que la gente no compra discos pero sí consume en Spotify y streamings a saco. Entonces es muy complicado poder entrar con la venta real de discos, que es lo que pesa más en la música Rock y Metal, pero con Cabaret de la Guillotine conseguimos entrar en el número 4 y ya con Angelus Apatrida llegar al 1 fue una pasada porque, además, teníamos competidores directos de estilos cercanos como una de mis bandas favoritas, que es Foo Fighters. Sacamos el disco a la vez y ellos entraron en el 3, o sea que imagínate cómo nos sentíamos. Al final es una magnífica señal que quiere decir que la escena española se encuentra en un estado muy bueno y que, sobre todo, tenemos una base de fans increíblemente acojonante y gracias a ellos conseguimos ese nº1.
Así que bueno, fue brutal y ahora iremos a la isla a ver qué os parece en directo.
Y muchas ganas tenemos, te lo puedo asegurar. Echando la vista atrás a vuestros discos, siempre ha habido mucha crítica social y política en vuestras letras, pero tengo la sensación de que en los dos últimos álbumes ha ido a más. ¿Es posible o son cosas mías?
Bueno, la crítica social siempre ha estado vigente en nuestras letras. Forma parte de nuestro ADN y, realmente, está en la esencia del Thrash Metal y del Punk o el propio Heavy Metal también, aunque haya peña que se empeñe en negarlo. Son nuestras raíces y nosotros llevamos haciéndolo durante veinte años, pero no creo que sea una connotación política. Claro que a día de hoy todo es político y más en los últimos años donde se ha polarizado tantísimo todo, que la gente está loca perdida. Pero en ese sentido Angelus Apatrida no ha cambiado absolutamente nada, nosotros seguimos sin ser una banda política y nos importa más bien poco la opción política que tengan nuestros seguidores, si son más conservadores o más progresistas o lo que sean.
Lo que no podemos tolerar, y más en una sociedad democrática moderna como esta, son los extremos. No podemos tolerar el fascismo, la homofobia, el racismo, machismo, etc. Cualquier clase de exclusión nos parece retrógrada y eso siempre lo vamos a defender, pero eso no lo considero política, sino de primero de democracia. Siempre hemos estado en esa lucha, con nuestras ideas y en defensa de la justicia social, que es algo que va implícito en esto que hacemos pero, partiendo de ahí, Angelus Apatrida nunca ha sido una banda política ni lo será. Todo lo demás ya depende de como cada uno interprete nuestras cosas y de si tiene el cerebro más o menos envenenado. Pero Angelus Apatrida siempre ha sido así y el Thrash Metal siempre ha sido así y así seguirá siendo.
El otro día lo comentaba sobre la peña que se pueda sorprender a estas alturas de las letras de Soziedad Alkoholika y que ahora digan “hostia, ¿Y por qué hacen esto?” cuando siempre ha sido su sello de identidad, así como este es el de Angelus Apatrida, por supuesto. Podríamos habernos dedicado a hablar de otras cosas, pero esto es lo que nos apetecía y para lo que queríamos utilizar nuestra música.
Siguiendo un poco con eso, he ido leyendo que la idea original era hacer un EP en 2020 pero por una movida que ha pasado se cancelaron los planes, que derivaron a este LP. ¿Es posible que ese cambio de planes, forzando un poco la situación, con tanto tiempo para pensar y tan poco para trabajar, ha hecho que hayan salido los Angelus Apatrida más viscerales en el disco? Porque os noto más cabreados que nunca…
Pues sí, es posible. De hecho, el disco está compuesto directamente en los peores meses de la pandemia y, claro, todo eso ha quedado plasmado. Pero, por otro lado, todo esto nos ha permitido darnos una vuelta de tuerca y entender mejor cómo queremos continuar en un futuro en ciertos aspectos.
No hace falta que ocurra otra tragedia mundial ni nada para estar así de enfadados (risas) o así de viscerales, mejor dicho, pero enfadados hemos estado siempre. Es lo que hemos hablado, esto es Thrash Metal, no somos de hablar de fiestas o de ir en monopatín, nuestra temática es un poco más seria en ese sentido y es lo que nos dedicamos a escribir.
Obviamente lo que ha pasado con el covid no ayuda. Sumado a lo que comentábamos antes, la radicalización y la polarización de la gente que nos muestra una sociedad tan hecha puta mierda como nunca nos habíamos pensado que veríamos, con el fascismo campando a sus anchas, incluso en las instituciones, lo que está ocurriendo en países como Polonia, Hungría, lo que pasaba en Estados Unidos con Trump, cuya sombra sigue ahí… y lo que tenemos aquí, que la gente ya prácticamente se está peleando constantemente. Esas viejas rencillas que parecía que se habían quedado en el olvido vuelven otra vez: que si los rojos, que si los fachas, que si los no se qué… y tú estás ahí y dices joder, pero si se suponía que deberíamos ir evolucionando hacia una sociedad y una democracia mucho más pura, pues toma. Y claro, así ha salido que estamos más enfadados y, sobre todo, más viscerales.
La idea era la que tu dices, grabar el EP porque cumplíamos 20 años en 2020. Aparte teníamos muchísimos planes de gira, iba a ser el mejor año hasta la fecha, y prácticamente no teníamos tiempo para terminar de componer ni para entrar a grabar. Pero se nos quedó un mes un poco caído entre gira y gira, que era abril, y queríamos entrar a grabar tres o cuatro temas.
Realmente no teníamos ningún tema terminado, sí alguna idea, algunos riffs… pero bueno, raro sería que no pudiéramos terminar tres o cuatro canciones para sacar un EP de 20 aniversario y después, al acabar todas las giras que teníamos, ya sentarnos a pensar en sacar el séptimo disco. Pero vino toda esta movida, los planes se fueron a la mierda y tuvimos que reinventarnos un poquito. Pillamos las ideas que teníamos y entre marzo y abril lo empezamos a componer y así hasta que empezamos a grabar a finales de septiembre.
Y en ese sentido, el hecho de cambiar de planes de esta forma, ¿Os hizo replantearnos cosas, como la estrategia a seguir con la discográfica Century Media o respecto a vuestro sonido, por ejemplo?
No, en ese sentido la verdad es que no ha cambiado nada. Nosotros siempre hemos ido un poco a lo que salga y la forma de componer y de grabar fue exactamente como hemos hecho siempre. Siendo una empresa, con nuestros permisos y tal nos podíamos mover y vernos pero realmente siempre hemos trabajado de la manera que estamos más a gusto, que es cada uno desde su casa, aprovechando las tecnologías actuales, Zoom, Whatsapp, etc. Es como mejor nos apañamos y con este disco fue tal cual así o tal vez incluso mejor, porque pudimos estar más tranquilos.
Por lo demás, Century Media siempre tiene completa confianza en lo que nosotros hagamos, no se mete nunca en nuestros asuntos y nosotros nos dejamos llevar, nunca hemos planeado cómo queremos sonar y esta vez fue igual. Los temas empezaron a salir así, luego toda experiencia como la que hemos vivido acaba sumando e, incluso, a veces hace que te reinventes un poquito más.
Y lo que está claro es que estos Angelus más viscerales han llegado para quedarse. Estamos en una nueva etapa, hemos hecho algunos cambios en materia de producción que han hecho que sonemos mucho más parecido a lo que es Angelus Apatrida en directo: mucho más torbellino, más salvaje, y es un nuevo punto de partida del que nos flipa volver a arrancar.
Partiendo de eso último, ¿El trabajo tanto de Juanan López (Baboon Records) en la producción, así como de Christopher «Zeuss» Harris en la mezcla y masterización ha influido en esa evolución? ¿Qué os han aportado en la grabación del disco?
Sí, sin duda. La verdad es que queríamos hacer un cambio grande en ese aspecto y teníamos decidido que íbamos a grabar aquí, en Albacete, que es algo que ya hicimos en Cabaret de la Guillotine y con este disco lo hemos perfeccionado con nuestro colega Juanan López de Baboon Records (con lo que aprovecho para decirle a la gente que tenemos aquí un estudio de grabación brutal).
El disco ha sido producido por nosotros en su totalidad y a partir de aquí buscábamos algo nuevo tras la etapa con Dani Cardoso. Con Century Media surgieron varios nombres y uno de mis favoritos siempre fue el de “Zeuss”, porque me flipan todos los trabajos que ha hecho con gente como Hatebreed, Vision Of Disorder, Overkill y demás. Sin duda, es uno de mis productores favoritos ahora mismo.
¿Y cómo os fue con «Zeuss», qué os aportó de su parte?
Pues cuando hablamos con él no nos conocía y le encantó el proyecto, le flipó la banda y enseguida nos pusimos a trabajar con las demos. A partir de ahí le dimos algunas directrices de cómo queríamos sonar y confiamos en su manera de producir lo que viene siendo un disco.
A partir de ahí, él nos dijo “si vosotros me enviáis una mierda, va a sonar muy bien pero seguirá siendo una mierda. Yo no os voy a cambiar nada, salvo que vea algo muy, muy jodido, claro, porque al final mi nombre va aquí. Pero si vuestras canciones son mierda, sonará a mierda pero muy bien”. Entonces, aunque todos los productores tienen sus filtros y sus detalles, lo que nos moló de él es que te hace sonar como debes sonar porque, si te fijas en sus trabajos, cada banda suena a ellos mismos: Overkill suena a Overkill, Hatebreed suena a Hatebreed, Rob Zombie suena a Rob Zombie… pero al final suenan todos de puta madre y eso es lo que nos flipa de su trabajo.
También le llevamos un producto que ya Juanan se curró sobremanera. Trabajamos muchísimo, Víctor (batería) se pegó un curro de producción que flipas, es todo absolutamente natural y, por primera vez, sin absolutamente nada de software de apoyo ni nada. Es todo, todo, todo, completamente natural y así se lo hicimos saber. Queríamos un disco super crudo, sin nada de apoyo, sin reamplificar ni nada y suena que flipas.
Cuando nos envió las primeras pruebas se nos saltaban las lágrimas de lo guapo que sonaba. Si no pasa nada, será nuestra primera opción junto a Juanan para el futuro, por supuesto.
Y bueno, cambiando un poco de tema y yéndonos al tema de los directos. Una buena muestra de que una banda está en forma es verla aparecer en los grandes festivales europeos, como por ejemplo el pasado Wacken de 2019, donde os pudimos ver con nuestro compañero Mega a los mandos. ¿Qué tal fue esa experiencia?
Pues, la verdad, brutal. Muy guay. Ya estuvimos en 2010 cuando Century Media nos presentó en sociedad, por así decirlo, y no tocamos allí pero pudimos estar en el festival y nos flipó.
Pensábamos «joder, el día que podamos tocar aquí…» y al final sucedió en 2019, con Mega como bien dices, que por entonces estaba un poco más disponible y pudo currar con nosotros. Que después el cabrón tiene mucho curro y es imposible coincidir con él.
Y sí, la experiencia brutal. Tocamos en el escenario pequeño pero no se veía el final de la gente, era impresionante. Hay ya movimientos por ahí para volver en otros años y ojalá poder volver a tocar por allí. El año que viene está complicado, porque la mayoría de festivales tienen los carteles cerrados de 2020, pero hay contactos y no perdemos la esperanza.
Imagino que en la relación con Mega tuvo mucho que ver aquella gira con Trallery y Skeletal Remains. ¿Qué tal fue aquello, visto ahora con perspectiva?
Sí, por supuesto. Nosotros conocíamos a Mega de oídas, sabíamos que era un técnico de primera división, uno de los mejores de España, y cuando surgió aquella gira invitamos a Trallery, que nos comentaron que vendrían con él.
A partir de ahí empezamos a hablar y, bueno, el principio de verlo trabajar fue algo brutal de decir “¡jo-der!”. Aparte que es un amor de tío, una persona increíble y como profesional es la hostia, por lo que desde aquello seguimos en contacto y cuando decidimos que se había acabado la etapa de nuestro anterior técnico hablamos con Mega y empezamos a trabajar con él.
Y en este bolo contaremos con la presencia de los isleños Main Line 10. ¿Fue cosa vuestra o de la organización?¿Los teníais controlados?
Yo sí los conocía, la verdad. Me flipa el Punk y el Hardcore Melódico y sí, me parecen una banda brutal.
Y en cuanto al bolo, debido a las circunstancias de Covid y las movidas que estamos, y yendo Angelus Apatrida a Mallorca que, a ver, seguimos sin ser (ni seremos) una banda mainstream, entonces, tratándose de un bolo un poco underground no lo teníamos pensado.
Pero se pusieron en contacto con nosotros, nos comentaron que les molaría entrar en el cartel y, joder, me sorprendió un montón porque dije «si es que os conozco, escucho vuestros discos y me mola un montón lo que hacéis», así que nada, hablamos con Xisco (Vargas) a ver si era posible por el tema horarios, espacio y tal, y ningún problema, así que aquí los tendremos y yo encantadísimo, estoy deseando verlos.
Parece que para este bolo por fin podremos estar de pie, ya esta semana pasada se quitaron las sillas y mesas de los conciertos en la sala, pero vosotros aún os habéis comido algún marroncete como el Primavera Sound o el Resurrection Fest con el respetable sentado. ¿Cómo lo vivisteis?
Bueno, el del Primavera sí que fue un poco raro. Estábamos tan ansiosos de volver a trabajar que ya nos daba igual como fuera y después de verlo vimos que no era para tanto, que se podía hacer, sabiendo que iba a ser algo temporal.
También es cierto que era muy pronto, ya que fue en agosto de 2020 y realmente fue muy diferente a los bolos que hemos hecho este año. Empezamos con bolos así, con el público sentado, pero poco a poco parece que se va levantando la mano con las restricciones, que ya era hora. En algún bolo empezábamos con el público sentado y a los dos acordes ya no había sillas o se armaban circle pits (risas) y era un anticipo de lo que estaba a punto de ocurrir a finales de verano, rollo de que esto ya no tiene ningún sentido. Por favor, que alguien con dos dedos de frente se siente y le de una vuelta a esto porque ya no hay por dónde coger el hecho de que sigamos haciendo conciertos así.
Y nada, parece que empezó a reinar un poco la cordura en algunos sitios, unos más que otros, y se van levantando un poco este tipo de sinsentidos. Aquí en Castilla-La Mancha llevamos casi tres meses con 100% de aforo en todos lados, con la única restricción de la mascarilla, que hay que respetarla, y ya está. No ha habido ningún brote, no ha subido la curva, no ha pasado nada y estamos mejor que en muchos sitios.
Así que me alegro de que en Mallorca ya no haya esas sillas, que la peña venga a pasarlo de lujo y nosotros vamos a darlo todo, claro que sí.
Pues ya para ir terminando y que tú puedas terminar de hacer tus cosas (risas), para la gente de la isla que aún no os controla o no os ha visto… ¿Qué pueden esperar de un concierto de Angelus Apatrida?
Uy, pues no sé, no sé si habrá mucha o poca gente que no nos conozca, desconozco como está la escena en la isla, pero tenemos las expectativas bastante altas, así que no nos defraudéis, ¿eh? (risas) Acudid en masa, joder, que lo vamos a pasar de puta madre.
No sé, yo creo que lo que la gente va a ver será un concierto de una banda en buena forma, que venimos de patearnos la península y parte de por ahí, que tenemos un disco bajo el brazo que ha sido número 1 y que lo defendemos a muerte en directo. ¡Si es que no os lo podéis perder! (risas)
Va a ser parecido a lo que hacen los guiris con el balconing, vamos a saltar, hacer un poco de ‘mosh’, a pasarlo de puta madre repasando nuestra carrera con especial hincapié al último disco, claro… y eso, una hora y media de bolo que no se lo salta un gorrino con zapatillas (más risas)
Pues de puta madre, tío. Nada más por nuestra parte, agradecerte de nuevo tu tiempo y nos vemos el sábado 20 de noviembre en Es Gremi.
Muchas gracias a ti y a vosotros por ayudarnos a darle un poco más de visibilidad al bolo y, nada, el sábado vamos a pasarlo genial.
Publicado por:
Aquí Jose, un apasionado del Rock y el Metal en prácticamente todas sus vertientes. Escribo en varias webs (La Poza del Meh, Dioses del Metal, Necromance Magazine) y colaboro en El Fantasma de la Opera Radio y la plataforma Heavy Balears.
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