
Palma, domingo 9 de enero de 2022
Concierto de Glass en la sala Es Gremi
Tarde de domingo de rock furioso y vibrante la que nos ofrecieron Glass en su esperado debut el pasado día nueve de enero en Es Gremi. ¿Quién quiere quedarse en casa viendo el fútbol cuando puede asistir al concierto de esta nueva y prometedora banda mallorquina de tan insigne currículum? Entre sus filas se encuentran Juanmi Bosch, Pollo, Toni Maltraste y Puro, casi nada al aparato.
Como reconocidos y experimentados músicos de la escena local, que nada tenían que demostrar, salieron a defender con uñas y dientes un repertorio que incluía, como no, Abolish the Power y Zapoi, los dos temas pertenecientes a su engrasado y afilado single debut.
Abolish the Power para empezar y meterle calor a las válvulas de los amplis, y Anyway y Tagai (con una interesante y divertida explicación didáctica de la letra a cargo de Toni, su frontman y maestro de ceremonias) para poner a tono las cuerdas vocales. Y ya metidos en faena, atacar con una acertada e irreconocible versión de Viper Mad, de Sidney Bechet.
Después se arrancaron con Bluebird, con el legendario Juanmi encendido (en esta nueva aventura al bajo), para pasar sin pestañear a All is for All. De ahí a uno de los momentos de la tarde, cuando atacaron con la tabla de surf bajo el brazo, y mirando a los ojos a Kerouac, El Camino Real, la tremenda road song de Lee Dresser.
Emocionante también el detalle y dedicatoria al «alcalde que nunca tendremos», el gran Toni Reynés, que mantenemos en el recuerdo, y ya puestos en Zapoi, otro de sus grandes temas, cuando Pollo desplegó toda su magia y precisión con esa telecaster que tan bien suena siempre entre sus manos.
Luego le tocó el turno a Glass, para anunciar que la cosa llegaba a su fin, no sin antes abordar el If I can Dream de Elvis, vestida de puro pub-rock, en plan Doctor Feelgood.
Ya en el bis, mientras Toni sostenía el vaso con la mano derecha, se despachaba cómodo y sobrado de energía para repetir Abolish the Power, ese tema que abre su primer single editado y que nos deja con ganas de más Glass. Esperamos volver a verlos pronto sobre un escenario, que está claro que es su sitio natural.
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