Fernandocosta – Echo de menos

«Echo de menos» es el tercer adelanto de Amor de Barrio, el próximo disco de Fernandocosta, anunciado para el mes mayo. Una balada donde el rapero ibicenco se abre en canal para homenajear a los que ya no están, recordando ausencias y revisitando recuerdos de tiempos pasados, más humildes pero más felices. La canción se encuadra dentro esos registros más personales e introspectivos que tan bien maneja el artista, donde lejos de renegar de sus modestos orígenes, los honra y los exhibe con orgullo. Una faceta que le permite mantener los pies en el suelo y conectar con su público desde su lado más íntimo y personal.

Si bien la canción funciona estupendamente a nivel musical y lírico, hay detalles en el videoclip de Oleg Brovchenko que no parecen conectar bien con esa ‘humildad’ que se pregona, hasta que encuentras la explicación que da sentido al cuadro. El vídeo está muy cuidado a nivel estético, sobre todo en cuanto al tratamiento de la luz y el color. Las escenas en la casa tienen un aspecto atemporal, como de sueño, con el artista brindando con familiares y/o amigos cercanos en un ambiente lujoso, pero como de otra época. Un ambiente distendido y familiar, aunque revestido de cierta gravedad.

Y entonces te fijas en que todos van de negro y que hay multitud de velas encendidas repartidas por toda la estancia, comprendiendo que el vídeo pretende recrear una suerte de velatorio, lo que hace que todo cobre sentido. Porque recordar lloroso «el bocata de la abuela en papel albal» con una copa de champán en la mano no invita a empatizar demasiado, a no ser que estés brindando por ella, junto a la familia, durante su velatorio o tras su funeral. Bajo esta nueva luz, letra, música e imágenes encajan a la perfección, y lo que antes chirriaba ahora cobra armonía. Y es aquí donde el detalle del rapero con su hijo en brazos, al final del vídeo, lo eleva, pues no hay mejor manera de honrar a los antepasados que continuar con la saga familiar.