Palma, viernes 11 de junio
Concierto de Zulu Zulu en la sala Es Gremi
Se hace raro entrar en la sala con el sol desapareciendo por el horizonte. Después de tantos meses de conciertos vespertinos en horarios más propios de adolescentes, por fin empezamos a recuperar la vieja normalidad. La misma sensación extraña que habrán sentido hoy los Zulu Zulu, quienes volvían a los escenarios tras meses de parón escénico. El lugar elegido, como no, fue la sala Es Gremi, gracias a su valiente y decidida apuesta por una programación que otorga gran espacio y protagonismo a los grupos locales.
Zulu Zulu llevan años triunfando con una propuesta musical alejada de todo convencionalismo, que no resulta fácil de describir. Practican una abigarrada combinación de melodías pop y ritmos africanos, con pinceladas de rock progresivo y psicodelia y onomatopeyas en lugar de letras, cuya descarada pretensión pasa por no dejar indiferente a nadie. Asiduos de festivales nacionales e internacionales, tuvieron a bien anunciar el evento con el irresistible titular que encabeza esta crónica, «Noche de amor y mandanga», por eso no me explico la floja entrada registrada en la sala, no alcanzo a entender el motivo. Tal vez por desconocimiento, o por la imposibilidad actual de bailar y disfrutar de una música que invita a ello, o por ofrecer una propuesta demasiado vanguardista en un contexto de saturación de oferta musical… Suposiciones lanzadas al aire que seguramente quedarán sin respuesta.
Empezaron sin avisar, saliendo al escenario casi por sorpresa, con la frialdad de un cuarteto de cámara. Era su primer concierto desde febrero y se les notaba deseosos de volver a reconectar con el público y exponer sus nuevas creaciones. Entre chistes pandémicos aludiendo a las restricciones impuestas y con constantes referencias a Fernando Simón, invitaron al público a bailar insistentemente, a lo que éste respondió de manera tímida y respetuosa con leves movimientos de brazos y cabeza.
Una vez metidos en harina, comenzaron con los conocidos temas de Defensa Zebra, su único trabajo disponible hasta la fecha. Abrieron con «Bamboo Position», «Kilimanjaro Birds» y «Sprots Kenia», para luego presentar los temas que formarán parte de Jaguar Paradisco, su próximo trabajo, entre los que seguramente encontraremos «Jaguar», «Motto Motto», «Zucka Lecko», «Dubtes Valley», «Lacoo Caiman», «Singuralitat», «Gafoplus» y «Suprafar». Ya grabado, aunque todavía sin publicar, se encuentran dando los últimos retoques al álbum para que pueda ver la luz en octubre.
En esta ocasión les acompañó Pep Lluís García, quien aportó su buen hacer a la percusión para envolver y dar un aire más tribal y orgánico al de por sí potente directo que caracteriza la puesta en escena de este trío. El fin de fiesta corrió a cargo del ya habitual Señor Pollo, quien revolucionó el gallinero con su actitud gamberra y provocadora para dejar en lo más alto una velada musical a la que sólo le faltó un público entregado al baile, una quimera pues la normativa actual no lo permite. Sea como fuere, pudimos constatar la consolidación de su insólita y genuina propuesta musical, que triunfa fuera de la isla y que, por desgracia, no termina de hacerse un hueco entre el público que los vio nacer. Si vuelves a ver anunciado un concierto de Zulu Zulu no lo dudes y apúntalo en tu agenda. Te aseguro que, al menos, no te dejará indiferente.
Publicado por:
Director de Mallorca Music Magazine, ejerciendo de fotógrafo, editor y redactor.
Apasionado de la buena música y las artes escénicas.
Fotógrafo especializado en fotografía musical y de conciertos.
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