¿Quién debe ganar un Concurso Pop Rock de Palma? Todas las claves e imágenes de la final

Preguntas, más preguntas, sorpresas, más sorpresas, alguna respuesta y crónica de la final

En semifinales sorprendió la selección de finalistas del jurado. Sin desmerecer a nadie, una pregunta fue casi omnipresente: ¿en serio al jurado no le arrebataron artistazos como Miss Loopita, Manena Duel, Silvestrecatapulta o Llvna? Lo cual llevaría a otra pregunta: ¿tiene claro la organización qué o quién debe ganar este concurso? Por enumerar alguna posible respuesta: ¿una propuesta musicalmente rompedora, un directo incontestable, quien haga de alguna manera bandera de la mallorquinidad? Una pregunta sí pareció tener respuesta: el jurado no pareció receptivo a las músicas más modernas, urbanas o a las mixturas en clave contemporánea. Y por encima de todo una pregunta final sí tiene respuesta única e indiscutible: ¿habrá Concurso Pop Rock el año que viene? La respuesta es y debe ser rotunda: debe haberlo. (V.M.C.)

THE RIPPLES

A los Ripples les tocó lidiar con la más fea. Abrir el concurso con un sol de justicia y escaso público aún en Ses Voltes no era el mejor de los escenarios. Pero ellos no se amilanaron y salieron con ganas, sonando genial desde los primeros compases, como en semis. Para su segundo tema, un rocanrol brioso, ya cabalgaban y se divertían sobre las tablas. No así el público, que aún no estaba ni en cuerpo ni en alma. Volvieron a bordarlo en su tercer tema, un medio tiempo entre nostálgico y épico, a lo Dylan. Continuaron por la senda de la melancolía en el cuarto, «Nights That Never Last», una bellísima melodía de aromas sureños donde jugaron con las armonías y con el corazón de aquellos valientes que iban acercándose tímidamente. Para finalizar, Nacho cambió de guitarra y volvieron a cabalgar con «Restless», un tema enérgico y dinámico que volvió a sonar excelente. Un fin de fiesta redondo para una actuación que mereció mayor recompensa. (K.F.)

Anterior

1de6

Siguiente

LIDIA ROMÁN

Y esa voz subió al escenario. Y la audiencia, respetuosa y sobre todo impaciente por oírla, calló. Porque hubo un hechizo en semifinales que nació desde su voz. Aun escasa de repertorio, suplió la ausencia de minutaje con hábil voluntarismo al animar al público a sumarse a la melodía. Se la vio y oyó feliz, casi risueña, menos encorsetada que en la fase previa. Por mor de dicha escasez solo interpretó tres temas, que como saldo final dejaron a la audiencia feliz y casi risueña. Fue breve, probablemente demasiado como para ganar un concurso musical, pero también fue redondo. Lo evidenció darse cuenta, cuando esa voz bajó del escenario, que el mar, respetuoso y sobre todo impaciente por oírla, también había callado. (V.M.C.)

Anterior

1de5

Siguiente

NEGRE

Conversación que tendrá lugar hacia el año 2053:
—Yo estuve en aquel concierto de Negre.
—¿Estuviste? ¡Qué maravillosa suerte la tuya!
—No creas, tampoco fue suerte. Algo se intuyó en semifinales.
—¿Ahí también fascinaron?
—Mejor: se intuía a las claras que serían capaces de fascinar en cuanto quisieran.
—Y se ve que en la final quisieron. ¿Cuánto hace, treinta años?
—No. Fue ayer. Para mí aquel concierto siempre será ayer.
—¿Cómo que fue ayer?
—Porque para mí aquel concierto no desaparecerá nunca. Ni de mi cabeza, ni de esta ciudad, ni de este mundo.
(V.M.C.)

Anterior

1de8

Siguiente

BILO (artista invitado)

Mientras el jurado se retiraba a deliberar tuvo lugar el concierto de Bilo, grupo invitado en calidad de ganador de la pasada edición del concurso. La banda mallorquina ofreció una magnífica actuación en la que realizó un amplio recorrido por toda su discografía, abarcando desde sus primeros y más psicodélicos temas hasta los más ligeros y relajados de su último disco. Como suele ser habitual en sus conciertos, la banda tocó a su manera desenfadada y distendida, disfrutando y haciendo disfrutar a la audiencia. Presentaron un par de temas nuevos que nos anticiparon hacia dónde evoluciona su música. Canciones luminosas, optimistas, juguetonas, en una línea aún más sencilla de lo que venían haciendo. Habrá que estar atentos a sus novedades, pues Bilo pertenece a esa estirpe de grupos que nunca dejan de evolucionar y sorprender. (K.F.)

Anterior

1de4

Siguiente