Contacta

Mallorca Music Magazine te acerca toda la actualidad musical balear con especial atención a la escena local.

DATOS DE CONTACTO

Tarifas agenda y banners

Publicado el 30 agosto, 2021

Loquillo: leyenda viva del Rock & Roll

Fotografías de Estefanía Duran
Texto por José Pozas
Loquillo - Mallorca Music Magazine
FOTOS LOQUILLO FOTOS ROULOTTE

Palma, jueves 26 de agosto de 2021

Loquillo + Roulotte en el festival Cultura es Vida

A eso de las 20:30, con absoluta puntualidad, salían a escena los mallorquines Roulotte, quienes venían presentando su reciente álbum Le Mans, con el que definen la vida como una carrera constante sin parar, con curvas, baches, alguna recta agradable y ritmo frenético, lo que vienen siendo las 24 horas de Le Mans, claro, y en el que añaden dejes de la música folk americana para darle más riqueza a su sonido.

A partir de un pop rock suave, amable y agradable de escuchar, Roulotte desgranaron buena parte de este nuevo trabajo, en el que incluyen temas en mallorquín por primera vez en su carrera y, la verdad, les queda muy bien para su estilo. Al final se trata, como ellos mismos han comentado en esta web, de una lengua muy agradecida a la hora de darle melodía. Además, al final el cantar en tu lengua materna se nota, incluso, en la interpretación de los instrumentos.

Dicho esto, Roulotte se mostraron con una puesta en escena sobria y humilde, sin grandes alardes y dejando el protagonismo a la música, donde destacó el buen hacer de Marc Grasas en la guitarra solista, dando mucho feeling a las composiciones de la banda, así como la buena interacción entre las voces de Miquel García y Bernat Company. Otro de sus puntos fuertes es la sobriedad de sus letras, introspectivas, con mensaje pero sin fliparse y perfectamente interpretadas.

Temas como la magnífica Mal de Pair, la rockera Cada Vez Que Me Disparas, de su anterior disco, Codo Con Codo, fruto del dichoso confinamiento, o el sentido homenaje a Charlie Watts con Death Flowers, de los Stones, sonaron bastante bien y animaron el ambiente a la media entrada, con alguna zona más vacía de lo que debiera, que presentaba Son Fusteret, para dejarle el terreno allanado a Loquillo.

Así, mientras Son Fusteret y sus zonas a medio llenar se iban completando hasta llegar casi al millar de asistentes, sobre las 22:15 el señor José María Sanz Beltrán hacía acto de presencia con su imponente figura y su inherente elegancia mientras sonaba Where Eagles Dare, de la orquesta filarmónica de Praga, a modo de intro.

Siempre de negro, con ese rictus de rockstar en la cara y dispuesto a dejar satisfecha a su fanaticada, plagada de padres y madres de familia educando a sus hijos en lo musical y algunos solteros crónicos, Loquillo vino a presentar El Último Clásico, su más reciente álbum de estudio, editado en 2019 y cuya gira, como otros tantos millones de planes, quedó aplazada por la dichosa pandemia.

Con un sonido notable, cuya intensidad cambiaba en el momento en que el Loco empezaba a cantar, eclipsando a sus instrumentos más de lo que me gustaría, tuvimos tiempo de escuchar temas recientes como Los Buscadores, muy adecuada para arrancar el concierto con energía, o El Hijo de Nadie, con los que empezó como un tiro, sin pararse a saludar hasta el sexto tema del show, que fue un Salud y Rock And Roll muy celebrado por un público al que le costaba contener las ganas de bailotear. Todo ello, por supuesto, conducido por los movimientos firmes, elegantes y sobrios que siempre han caracterizado al barcelonés.

Mención aparte merece la sensacional banda que acompaña al vocalista, Laurent Castagnet a la batería, Josu García, Pablo Pérez e Igor Pascual a las guitarras, permitiéndose el lujo de aportar nuevos matices a los temas al contar con tres hachas, y el uruguayo Pablo Rodas al bajo, sustituyendo a Alfonso Alcalá, que no pudo venir por cuestiones del covid. Músicos veteranos, serios y profesionales, imprescindibles para un espectáculo a la altura de un tipo con la trayectoria de Loquillo.

…pero lo cierto es que en Son Fusteret ofreció un concierto de muy buen nivel, apoyándose en su enorme presencia, su carisma, su actitud y las tablas de una larguísima carrera que ha tenido momentos de todo tipo, además de en la magnífica banda que le acompaña.

A partir de ahí, algunos discursos breves, con mensaje más o menos cuestionable, iban dando paso a los temas como la poderosa Rock Suave, una de mis favoritas del repertorio, la emotiva Cruzando el Paraíso o El Último Clásico que, irónicamente, fue el último tema reciente antes de empezar a soltar la mascletá de clásicos que daría con el final del show.

Así, como es habitual en artistas de trayectoria dilatada, empezó a lanzar El Rey del Glam, Rock And Roll Actitud (con el loop de Baba O’ Riley ejerciendo de intro bajo los agradecimientos de Loquillo a la organización, al público y demás), o un canto contra los tiempos políticamente incorrectos, según sus palabras, como fue Chanel, Cocaína y Don Perignon, dando paso a La Mataré, que ya se encargó el sr. Jose María de recordar que es la primera canción de rock en español en contra de la violencia de género, premiada por Radio 3 y todo eso, por si acaso alguien sigue pensando que el tipo iba a matar a nadie.

Poco más que decir, quedaba lo más gordo, lo que había metido a la mitad de los casi mil asistentes en el recinto. Típico amago de «me voy, gracias Mallorca» y regreso inmediato con la versión de El Hombre de Negro de Johnny Cash, las tres efes: Feo, Fuerte y Formal y, por supuesto, El Viejo Cadillac, en la que el público acabó de pie (cada uno en su mesa, ojo, que nos portamos bien), aplaudiendo, cantando y agradeciendo a Loquillo su visita a la isla.

Un show más que digno, sí. Sesenta años de edad y cuarenta de carrera se notan en todos los sentidos. Está claro que ha tenido épocas más brillantes, pero lo cierto es que en Son Fusteret ofreció un concierto de muy buen nivel, apoyándose en su enorme presencia, su carisma, su actitud y las tablas de una larguísima carrera que ha tenido momentos de todo tipo, además de en la magnífica banda que le acompaña. Al final Loquillo es un tipo que sabe conducir a su público, llevarlo a su terreno y hacerle disfrutar con una serie de temas que, quieras o no, son auténticos himnos del rock en español.

Enrédate en nuestras redes:

Publicado por:

Empezó en el mundo de la fotografía hace más de 10 años. Dedicándose desde sus inicios al mundo de la comunicación y la imagen, la fotografía de conciertos fue lo primero que despertó su amor por este arte. Según ella: "le encanta capturar la energía y la pasión de los que lo dan todo encima del escenario".

Aquí Jose, un apasionado del Rock y el Metal en prácticamente todas sus vertientes. Escribo en varias webs (La Poza del Meh, Dioses del Metal, Necromance Magazine) y colaboro en El Fantasma de la Opera Radio y la plataforma Heavy Balears.

No hay comentarios

Deja un comentario

Con la colaboración de: