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Publicado el 17 noviembre, 2024

Joan Pérez Villegas (Alanaire): «Hay que tener la finura de sonar sencillo y orgánico»

Por Conejomanso
Alanaire por Natxo Bassols - Mallorca Music Magazine
Alanaire por Natxo Bassols

Joan Pérez-Villegas (Palma, 1994) solo, o eminentemente, respira música. Por tanto solo, o esencialmente, vitalmente, exhala música. Es percusionista, batería, compositor y arreglista, y bastante contundente su currículum académico y profesional: estudios de percusión desde los ocho años en el Conservatori de Palma, percusión clásica y contemporánea en la Escola Superior de Música de Catalunya ESMUC, con posterior ampliación de intereses en composición e improvisación. Barcelona Jazz Master en composición, ha sumado estudios de composición en la academia de artes HKB de Berna. Ha escrito desde música de cámara hasta sinfónica, pasando por trabajos para orquestas de jazz y músicas para danza o teatro, tanto pop como música tradicional. En 2019 presentó Blau Salvatge, su primer proyecto como compositor y líder de banda. Actualmente productor freelance, también actúa y compone para las compañías GN|MC de danza y Atzar de teatro.

Y además, Alanaire. ¿Le basta Alanaire para desarrollarse, expresarse y completarse? Habrá que preguntárselo. Un EP homónimo de tres temas en marzo de 2021, producido Dominic Massò exPrussians, ahora DMASSO, editado por Promo Arts. El LP debut Albor en junio de 2022, producido por la banda, mezclado por Joan Miquel Oliver y masterizado con Mateu Picornell, en la misma disquera. Todo ello plantó un árbol cuyas ramas enraizaron en un universo de oyentes amplísimo, felizmente heterogéneo. Por tanto, eran muchísimos universos esperando más. Básicamente por lo que explicitó Oliver: «Són intèrprets virtuosos que fan una passa enrere perquè la senzillesa del pop els ho demana». Son Laura Serra (voz y piano), Pau Serra (bajo), Leire Corpas (guitarra) y Pérez-Villegas (batería).

En este mundo ultrarrápido en todo y para todo, siete canciones y un interludio han tardado dos años en llegar. Por fin, ya han nacido y ya están creciendo. El segundo trabajo, Fer com si tot fos no res, llega ahora en el sello gironí U98. Grabado en el estudio La Casamurada (Banyeres del Penedès, Tarragona), con producción de Dani Ferrer (Mi Capitán, Love Of Lesbian, Zahara, Standstill…) más mezcla y máster del fundamental Panxii Badii. A las fotos y portada, de nuevo, como siempre, Natxo Bassols.

«Si jo fos un arbre / sa paciència seria es meu passatemps / xerraria s’idioma secret des vent» [son los primeros versos de «Si jo fos (o cançó de l’arbre)», tema que abre el disco]. ¿En qué época o mundo quieren vivir Alanaire que le cantan a la tranquilidad y al sosiego, inmersos como estamos en la hipervelocidad social, económica, sentimental?

[ríe] Sí, siempre ha chocado, desde el principio. ¡Es que así es nuestra música! Todos tenemos un temperamento digamos calmado, melancólico. Ya lo decíamos con el anterior disco, el mensaje es cogerse el tiempo necesario para disfrutar de las cosas y vivirlas con plenitud. Por eso este es un disco que necesita de una escucha activa.

Primero, qué ha habido más: ganas, ansia, necesidad, presión, compromiso. Y segundo, si más dentro o fuera de la banda.

Ganas dentro, sin duda. La pasión, amor y energía han salido de dentro. Desde fuera sí se puede notar que hemos simplificado estructuras y formas musicales. No es algo expresamente impuesto desde fuera, pero sí hemos notado ese compromiso, esa petición. Por suerte, o por desgracia, hay discográficas, distribuidoras, etc. En el anterior sello nos pedían algo más pop, más sencillo, más comercial y convencional. Y nos costaba mucho entrar en eso. Para mí, nos pedían ir hacia lo vacío. Este disco tiene elementos más pop, pero espero que se vea claramente que hemos ido hacia donde hemos querido. Son letras, armonías, con mucho significado, en absoluto banales.

Porque aparte de las presiones y directrices de la industria, reales, constantes e inevitables, una de las cosas maravillosas que puede generar la música es haber encontrado a alguien fiable, o hasta infalible. Alguien cuya visión y opinión de tu propia música siempre aporta o incluso enriquece. ¿La tienes?

Sí, por supuesto. Por ejemplo Natxo [Bassols, fotógrafo colaborador habitual de la banda]. Siempre se ha permitido y nos ha encantado que de su visión, incluso con críticas duras, pero siempre sinceras. Todo el mundo tiene «consejeros».

Sean o no del mundo de la música.

Exacto. Gente que escucha desde el corazón. Incluso a veces les he escuchado demasiado tarde [ríe].

Dijo Laura hablando del primer disco: «La experimentación sonora y compositiva ha sido muy importante (…). Reinventarse es parte de la filosofía de la banda». ¿Esos leitmotivs siguen ahí? ¿Habéis viajado tan lejos y tan diverso como pretendíais?

Sí, estoy convencido. No significa complejidad, pero hemos conseguido lo que pretendíamos. Hasta diría que el disco suena mejor de lo que esperábamos porque han surgido cosas que no esperábamos: cambiar estructuras, meter nuevos timbres, juegos con pelotas de ping-pong, nuevos instrumentos, incluso percusión corporal. Aunque como digo, todo no gratuito sino siempre con intención.

Alanaire - Fer com si tot fos no res (portada) - Foto por Natxo Bassols - Mallorca Music Magazine
Portada del álbum "Fer com si tot fos no res" - Foto: Natxo Bassols

También dijo: «Si nos lo podemos permitir, nos gustaría probar en el siguiente disco la manera más convencional, grabando la banda conjuntamente en el estudio». ¿Ha sido así?

En buena medida sí. Hay temas como «Si jo fos (o cançó de l’arbre)» que se han quedado con la base que tocamos todos juntos, aparte de lógicamente luego regrabar algunas voces. O «Paraules esborrades».

Porque superado el síndrome del primer disco, ¿preparados para el síndrome del segundo disco? Pueden ser varios: no repetirse, tener que componer más rápido, satisfacer la expectación ajena.

Sí, tenía entendido que iba por hacer algo parecido a lo que le ha gustado a la gente, pero teniendo que añadir cosas nuevas. El resultado es que aunque haya canciones que tienen dos años, al mismo tiempo disfrutamos mucho de tocarlas en directo.

Luego vendrá el síndrome del tercer disco.

Lo sé. Vivimos entre síndromes constantes.

Entre Paul Simon, Radiohead y Bon Iver hay un océano de creatividad, de maneras de entender y hacer música [tres nombres que Pérez-Villegas ha referido como muy valorados]. ¿Pero sabes qué me sorprende de siempre? Que la esencia de Alanaire sea pop. La composición, los arreglos, la producción son exquisitos. Y al mismo tiempo, con vuestro nivel académico y profesional, no digo que vayáis a lo dodecafónico o atonal, pero me pregunto si os veis obligados a hacer un ejercicio de contención puramente técnico.

Sin duda. Tienes que simplificar. Tal vez eso se notase más en el primero, que puede resultar incluso soberbio, algo excesivo. Hay que tener la finura de que suene sencillo y orgánico. Hay mucha sutileza en ritmos, líneas, estructuras que no son habituales en el pop, que pueden no captarse en una primera escucha.

El mundo funciona al revés y todo da mil vueltas, demasiadas vueltas. Pero centrándonos en vuestro método de trabajo: ¿cómo funciona la banda? ¿Primero músicas y/o bases, primero letras? ¿Quién, cómo, cuándo, dónde?

Normalmente subimos ideas a un Soundcloud privado, y a lo mejor uno acaba una idea que ha tenido otro. También a menudo alguien sube un tema más o menos completo, o al que solo le añades un elemento concreto pero fundamental, como una línea de guitarra. Después, normalmente las letras son obra de una sola persona, ahí hay menos trabajo colectivo. Aunque a veces, como en «Mil voltes», la escribimos entre todos y en el último momento [ríe]. En otras ocasiones hay elementos de electrónica o sintes que se quedan tal cual porque los has metido con algún instrumento que tienes en casa.

Alanaire - Mallorca Music Magazine
Alanaire por Natxo Bassols

Batería, percusionista, compositor, arreglista, productor, actor. ¿Te basta Alanaire? O tal vez mejor planteado: ¿qué te colma Alanaire?

Me interesan muchos aspectos de la música. Alanaire me gusta y me colma muchísimo, pero simplemente necesito poder expresarme por otras vías.

Sencillamente más allá de la batería.

De hecho no soy realmente batería sino percusionista. Trabajo mucho con láminas, vibráfono o marimba.

Y en concreto en tu aportación como compositor: escribes para una voz, la de Laura. Eso te tiene que condicionar.

Claro, y a veces ha sido muy divertido tener que adaptar a su voz algo hecho por otra persona de la banda. Yo particularmente cuando escribo pienso siempre en su voz. De hecho, me gusta animarla a que pruebe, a que vaya más allá de lo que está acostumbrada.

De nuevo llegar hasta donde no se pensaba que sería posible llegar.

Es así. A menudo cada cual tiene muy claro hasta dónde puede llegar, o te acostumbras a ello, y cuando alguien te anima o te hace llegar más lejos es genial.

¿Por qué no cantas?

He hecho segundas voces, pero considero que no tengo buena voz.

Alanaire - Mallorca Music Magazine

Eso lo dirás tú. No hace falta decir que lo importante es la capacidad de transmitir. Hay miles de ejemplos en la historia de la música.

Cierto, pero no creo que sea capaz con mi voz [ríe].

¿Mallorca se va a la mierda?

Más que Mallorca, la gente de la isla. Aparte de territorio, naturaleza, patrimonio ecológico… (piensa) creo que sí. Podríamos estar media hora hablando. A veces imagino Mallorca dentro de veinte años, y claro que habrá una cultura, o seguirán existiendo playas preciosas, pero de ricos para ricos. No de gente trabajadora. O esa gente estará trabajando para esos ricos. Me da bastante ansiedad. Viendo por dónde van las cosas no puedo imaginarme un futuro que me guste.

Es inevitable inspirarse en lo generacional de uno mismo, y por tanto lanzar esos mensajes en forma de canción para la generación propia. ¿Y qué hacemos los que tenemos 49 años? ¿Podemos escuchar, entender y conectar con Alanaire? Y no digo que yo no lo consiga, o que no vea a mi alrededor que sucede.

La manera como hacemos los temas, poética y metafórica, sin ser muy explícita, habla de cosas que importan a todo el mundo. Inseguridades, amor y desamor… También canciones como «Aurora» [en sus propias palabras, «homenatge a la memòria d’Aurora Picornell, però també a la de totes les persones a les quals se’ls ha arrencat la vida per defensar uns ideals»; incluye la colaboración de Magalí Datzira]. Y musicalmente diría que somos más para una generación que no es la nuestra [ríe].

Escuchando «Si jo fos (o cançó de l’arbre)» he imaginado a niños pequeños cantándola.

Es que es eso, quiero pensar que es un disco que incluso puede llegarles. Lo importante es la canción en sí. El mensaje, la melodía y su narrativa.

¿Novedades en vuestro nuevo directo?

Tenemos la novedad, ya presentada en alguna ocasión, de llevar a Mauri Fernández. Es un amigo uruguayo que tocará teclados, liberando a Laura del rol de solista. Y sobre todo que hasta ahora hemos ido cargados de elementos tecnológicos, claqueta, metrónomo, etc. Este disco es muy orgánico, y por eso el directo será a la vieja usanza, sin nadie bailando ni disparando bases. Seremos personas reales tocando para personas reales.

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Publicado por:

Víctor Manuel Conejo Manso en Mallorca Music Magazine

Periodista de Cultura desde 1997. Lo último, 18 años en Diario de Mallorca (también como diseñador editorial). Antes recuerda haber pululado por Cadena Ser/Radio Mallorca, IB3 TV/Ràdio, Mondo Sonoro Balears, Youthing o Radioaktivitat, más diversas promotoras, productoras, agencias de comunicación, centros de creación y gestión cultural, etc. Ingresos extra como DJ y liante.

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