
En el año 1964 Drew Bundini Brown, uno de los entrenadores de confianza de Muhammad Ali y en los momentos previos a la crucial pelea ante Sonny Liston, le regaló un certero consejo que desde entonces ha quedado marcado en la historia y no sólo del deporte, el amigo Drew susurró al oído del campeón «Vuela como una mariposa, y pica como una abeja (Float like a butterfly, sting like a bee)».
Me acuerdo de esta historia, porque acabo de escuchar y de disfrutar mucho con el último álbum de Travis Birds publicado el pasado 26 de marzo. El disco se llama La Costa de los Mosquitos y está producido por Alvaro Espinosa y editado en Calaverita Records. El arte de la portada del disco es obra de Lord Cah (su hermana gemela) y de la propia artista. La Costa de los Mosquitos ha sido grabado en La Habitación de Sol Estudio y masterizado en Mastering Mansion Madrid.
Está compuesto por 10 temas originales con una duración sonora de 2.510 segundos. Y hablo de segundos porque cada uno de ellos es importante. Es como si se tratara de diminutos eslabones de una cadena mágica que nos van envolviendo, acariciando y, por momentos, golpeando, en la que todos juntos nos cuentan y nos regalan una historia nacida del diálogo interior de Travis que generosamente y sin arrugas entrega al mundo en voz alta.
La letra que acompaña a su música es como la de una carta nunca entregada, ni tan siquiera enviada, pero sí eternamente meditada. En los textos se presenta como si estuviera en una constante dualidad entre la razón y el corazón, en una lucha entre dos mundos que enfrenta la fascinación por la belleza que nos ofrece la naturaleza como una verdad frente a la fragilidad, incertidumbre e imperfección de las relaciones humanas.
… dos ojos negros guiándome por el camino incierto de tus manos… (La Vela)
En las letras, sus palabras son orgánicas y sensitivas. Muchas veces giran alrededor de los cuatro elementos de la naturaleza, fuego, agua, tierra y aire, y sus principales verbos son soñar, amar, dormir, creer, confiar, explorar… pero también olvidar, ocultar, escapar… y siempre encontrar.
Y me fui al lugar más peligroso de la selva para mezclarme en la maleza y encontrarte de cara… (Maleza)


Travis habla con palabras bonitas de lo íntimo y, cuando estas palabras brotan, se universalizan y empatizan con todos. El mensaje con la música de Travis Birds, en algunos momentos nos llega y agita como el crujido de un cristal roto, en otros es como si acariciásemos un tejido ligero, suave y muy fino, es auténtica seda.
Su música se acuna y balancea entre los sonidos y ritmos de la música tradicional, del folklore latino. También es pop (en su definición más amplia) y su voz tiene una tesitura muy especial, con mucha «alma y sentimiento», y lleva en ella, de forma natural, la fuerza y el rango de géneros tan nobles como el flamenco o la copla.
Hay una vela escondida en la parte de atrás de su corazón… (La Vela)
A Travis nunca le gustó su nombre, decidió cambiárselo en 2010 y, curiosamente, el pseudónimo se lo debe al personaje interpretado por Robert de Niro en la película Taxi Driver de Martin Scorsese.
Las influencias musicales de Travis son muy ricas y eclécticas, desde Tom Waits a Nirvana, pasando por el cantaor flamenco sevillano El Cabrero, o también Jorge Drexler, Extremoduro, Chet Baker o Amy Winehouse, y de alguna manera todo ello reluce en su música.
Su primer álbum, Año X, es un disco autoeditado con diez canciones basadas en diez historias que ven el mundo con un punto de vista muy peculiar, y que se logró gracias a las aportaciones de 53 generosos visionarios, en una campaña de crowfunding realizada en mayo del 2016.
La carrera musical de Travis se precipitó a raíz del éxito en el año 2019 de su single «Coyotes», elegido como cabecera de la serie El Embarcadero (de Movistar Plus).
Hay un trozo de luna que nunca me dice su nombre… (Claroscuro)
Y también su éxito se disparó recientemente por su brillante participación en el disco Tributo a Sabina. Ni tan joven ni tan viejo, con el tema «19 días y 500 años después» interpretado junto al novelista Benjamín Prado y en el que también participaron artistas de la talla de Bunbury, Coque Malla, Alejandro Sanz, Joan Manuel Serrat o Rozalén, entre otros.
Pero tú, invadido por la calma, y yo con un ansia ciega… (Acordes de Jazz)
Travis Birds junto a su banda se presenta y confirma como una de las artistas más prometedoras del panorama musical de este país, y conviene seguirla muy de cerca.
Próximos conciertos en Baleares
- 17 de junio: Es Claustre (Menorca)
- 18 de junio: The Attic (Ibiza)


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Director Artístico de los Festivales y Conciertos: Innside Soul weekend Mallorca, Daltonyc Fest y Moscari Black Music.
Creador y conductor desde hace 30 años de diversos programas musicales: Merienda de Negros, Semilla negra y La Isla de las Voces, emitidos en: Radio QK, Radio Marratxí, BN Mallorca Radio, Radio Pra y Radio Calvià.
Agitador cultural, DJ y miembro fundador de la asociación Mallorca Black Music, así como colaborador ocasional del blog Acidjazzhispano y de la revista Enlace Funk.
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