Jara sigue creciendo

Ciudad Jara es el nombre del nuevo grupo de Pablo Sánchez Pardines. Pablo era uno de los vocalistas y el líder del grupo valenciano La Raíz, un grupo musical compuesto por 11 personas diferentes y distintas, unidas por la amistad y por la música. 11 personas que iniciaron su sueño en el 2006 y que en 12 años publicaron 4 discos de estudio, 2 singles y un último trabajo, un DVD grabado en directo durante su directo en el Palacio de Vistalegre, Madrid.

Pero en 2018 anunciaron su despedida, su disolución como grupo, iniciando así la gira de despedida que finalizó en noviembre de 2018 en su casa, en Valencia, en el Auditorio Marina Sur, bajo un cielo lluvioso que no dejó de llorar como si lamentase el final de esta banda que a través del rock, el ska y el hip hop y su energía brutal nos hizo bailar durante estos años.

Poco después de esta despedida muchos de sus componentes anunciaron sus nuevos proyectos, y es que la raíz musical seguía allí pero querían seguir caminos distintos, y necesitaban vivirlos con ritmos diferentes. El primero en abrir esta nueva etapa fue Juan Zanza, que sin abandonar la guitarra tomaba la voz de su nuevo grupo Valira. Le siguieron Edu Soldevila, Xavi Banyuls, Sen-k y Julio Maloa, que se transformaron en Nativa. Finalmente, Pablo anunció la creación de su nueva banda, Ciudad Jara, y su primer trabajo, Donde nace el infarto.

Ciudad Jara es una formación de rock cuyo estilo mantiene reminiscencias de La Raíz, la poesía y la sátira social, a las que se añaden la influencia de la canción popular y la sensibilidad del cantautor. Pero es, sobre todo, un proyecto más personal, más intimista, más emocional; es un fiel reflejo de la sensibilidad de Pablo, es su casa, su ciudad, su hogar. El nombre de Jara no es gratuito, tal vez sea un homenaje a Víctor Jara, director teatral, poeta, cantante y compositor chileno; pero seguro que es un homenaje a la «creación» más importante de Pablo, su hija pequeña a la que incluso dedica una canción en este primer trabajo, Las nanas de Jara. Y para poder llevar a cabo este proyecto se rodeó de músicos de gran nivel, pero que ante todo eran amigos, como Tato James, guitarrista también con La Gossa Sorda y con Xavi Sarrià, junto con Juan Belda, Jordi Martí, Joan Marc (Auxili y La Gossa Sorda) y Miquel Ramos.

Pero todo este proyecto personal se vio frustrado por la pandemia, ya que el 19 de marzo debía iniciarse la gira presentación en Madrid, en la sala Joy Eslava. Durante todo este tiempo ha luchado por mantener viva esta ciudad y hacerla crecer a través de las redes sociales, y adaptando los conciertos a las nuevas y cambiantes restricciones. Incluso ha dado un paso más y ha escrito una canción que es la banda sonora de la última película de Álex Montoya, Lucas.

La película cuenta la historia de dos personas: Álvaro, un hombre confuso por sus propias oscuridades, y Lucas, un joven de 15 años asediado por la pandemia del acoso escolar y con deseos que Álvaro puede ayudar a cumplir. Un nudo en el Cordel es la canción que acompaña con su poesía esta historia, que tiene en su huella dactilar polvo de soledad. Canta a alguien que solo está rodeado de soledad, que se impide avanzar, que él mismo se ata, se anuda para volver a caer; que se precipita al abismo sin remos ni barca y solo guarda en su corazón la imagen de la muerte. Otros versos nos dibujan algunas de las acciones que harán avanzar la historia del joven Lucas. La voz de Pablo acompaña a la perfección esta triste historia, que con una melodía variante parece querer dibujar cierta esperanza, pero con una percusión disonante en un momento de la canción nos hace viajar a otros mundos, al del folclore popular, para inmediatamente retomar el ritmo inicial. Tal vez sea un anuncio de los viajes y vuelcos de una historia que tiene sangre de sur.

Vamos a vivir de a poco, que la pena cuando no vale termina

Esta historia, junto con otras colaboraciones en las que está participando Pablo Sánchez y su banda, ha hecho crecer a esta pequeña Jara. Tal vez su colaboración más conocida sea la del último disco de Txarango, El Gran Ball. Pero más reciente es su última incursión musical con el Colectivo Panamera, un grupo musical compuesto por Nacho Taboada (guitarras y voz), Pepe Curioni (guitarras, bajos y voz) y Vanja Polacek (batería y voz), para transmitir la alegría por vivir con su segundo disco Mares por Navegar, y gracias a la canción Hace días en la que Pablo se atreve a adentrarse en estilos musicales diferentes y lejanos. Es una canción suave, exótica, tropical que canta al desamor, a su proceso, a sus heridas, al abrazo de la soledad, pero, sobre todo, a aprender a lamerse el dolor.

Esta historia de desamor se grabó en La Ciudad del Mar de Valencia. Todo esto nos demuestra que Pablo tal vez necesitaba hacerse pequeño y más personal para encontrar el camino del cantautor que siempre ha anidado en su alma musical, y así formar parte de proyectos más íntimos, hondos y originales en los que su ciudad, su Ciudad Jara, sí tiene cabida. Jara sigue creciendo.