Trui Son Fusteret, el popular espacio de entretenimiento en Palma, cerró positivamente su temporada de verano consolidándose un año más como uno de los epicentros de la cultura y la música en vivo de Mallorca. Así lo corroboran las cifras, con más de 20 conciertos, 4 festivales, la participación de 70 destacados artistas y, sobre todo, los 147.000 espectadores que acudieron a alguno de sus eventos.
Del 13 de mayo al 9 de septiembre Trui Son Fusteret desplegó una variada programación colmada de artistas nacionales e internacionales de primera línea. Desde la legendaria maestría de Joaquín Sabina, Miguel Ríos o Loquillo hasta la energía contagiosa de Manuel Carrasco, Pablo Alborán, Marea, Hombres G, El Barrio, Pablo López o ZOO. Una programación muy ecléctica que también incluía DJs y festivales electrónicos internacionales como Origen Fest, Elrow, Charlotte de Witte, Mochakk o Wade, que hicieron vibrar al público con sus sets y performances electrizantes, o las actuaciones del Circo Raluy, Stunt Show y el espectáculo The Hole 2, añadiendo mayor diversidad aún al programa.
Gracias a esta ambiciosa oferta, este verano pudimos disfrutar de la experiencia cuasi religiosa de asistir a un concierto de Joaquín Sabina o, sin ir más lejos, inaugurar un nuevo tour del incombustible Miguel Ríos. A sus 79 primaveras, el granadino se mostró en buena forma en el concierto que iniciaba su gira por el cuarenta aniversario del mítico álbum «Rock and Ríos».
Otro por el que parece que no pasan los años es el bueno de Loquillo, que el pasado agosto nos deleitó, junto a los también míticos Ilegales y La Granja, de un espectacular concierto en la X edición del Iberia Festival a su paso por Palma. Tan solo dos días después, los valencianos ZOO subieron al escenario con su propuesta festiva y reivindicativa en su único concierto programado en Mallorca para este año.
El único contratiempo de todo el ciclo fue la cancelación a última hora del concierto de Rauw Alejandro debido al temporal que asoló el archipiélago. Un gran revés emocional para la legión de fans que atesora en la isla el artista puertopuertorriqueño.
Miki Jaume, responsable del Grup Trui, ha manifestado públicamente que este año ha sido más exigente que el anterior, donde la euforia motivada por el final de la pandemia llevó a superar con creces las expectativas de asistencia más optimistas. Aún así califica el balance de la temporada como muy positivo. Con una oferta plagada de figuras internacionales y una asistencia que osciló entre 2.500 y 13.000 espectadores por evento, Trui Son Fusteret contribuyó de nuevo a la promoción de Mallorca como destino cultural, aunque en palabras del propio Jaume «hay que avanzar en este camino».
Y hablando de avances, otro de los aspectos que cada vez más se le exige a la industria del entretenimiento es su compromiso con la sostenibilidad. En este capítulo destaca la puesta en marcha de la Trash Lottery, una innovadora iniciativa capitaneada por la marca Heineken que incentiva a los espectadores a reciclar la basura generada en cada evento. Una experiencia que obtuvo muy buenos resultados en los 4 conciertos de Son Fusteret donde se llevó a cabo, logrando recolectar más de 2.000 kg de residuos y allanando el camino hacia un futuro más responsable y concienciado con el medio ambiente.
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